REGALO DE LOS REYES MAGOS: TRABAJO, SEGURIDAD Y SALUD

La celebración del 6 de enero -Día de los Reyes Magos- no acaba, solo se transforma con la pandemia. Ya no es oro, incienso y mirra.
La tradición no muere, solo se transforma por la pandemia. Ahora, los juarenses no pidieron oro, incienso y mirra. Solo trabajo, seguridad y salud, este 6 de enero, Día de los Reyes Magos.
En una mañana soleada, incluso tibia, los llamados Ángeles Mensajeros, se colocaron frente al monolito JRZ. En el epicentro del corredor turístico Juárez-16 de Septiembre, las personas recibieron un vaso de champurrado, un trozo de rosca y un mensaje alentador.

Desde las colonias del poniente, decenas de personas bajaron al Centro de Juárez. Apoyados en bastón, otros con una bolsa para recoger alimentos, unos más sin nada en las manos, solitarios.
Una larga mesa, cubierta con manteles de plástico, contuvo las 50 roscas de reyes, aportadas por Ángeles Mensajeros A.C. Las rebanadas estaban cortadas a partes iguales por jóvenes de distintas iglesias evangélicas.

Celebración de los Reyes Magos: entre las roscas artesanales y las del súper
En otros sectores de la ciudad la celebración estuvo concurrida desde temprano, como en la panadería Gardenias, ubicada en el cruce de avenida de los Insurgentes y Cadete Agustín Melgar.
El santo olor de la panadería, de la antes Espiga de Oro, no lo puede contener la puerta de cristal cerrada. Desde las 11:00 horas se agotaron las mil cajas con la rosca tradicional. Había solo 10 con una etiqueta de “vendida”.

“Los pedidos se levantaron desde ayer”, dijo Magdalena Rodríguez, dependencia de la panadería, ocupada entre donas de chocolate, esponjas, aletón tostado, yoyos y semitas de piloncillo, del mero Michoacán.
Conforme al portal de la Secretaría de Economía, del Gobierno federal, aun con pandemia, se estima que este año se consumirán más de 10 millones de roscas en todo el país.
Además, la secretaría calcula que aproximadamente 600 mil personas trabajan de forma directa en la industria panadera. Al mismo tiempo, por cada empleo directo generan tres de manera indirecta, de acuerdo con datos de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora.

“Aquí, nos conviene comprar al menudeo a Costco. No tiene pérdida, son más económicas y se le saca más ganancia”, señaló Daniel García, propietario de la tienda de abarrotes Los 3 García.
En contraste, la panadería La Dalia -ubicada en la calle Fernando Montes de Oca y Simona Barba-, lugar que tiene 40 años de buen pan y de venta de Rosca de Reyes, elaborada de forma artesanal. La tradición no muere. Se transforma. Por Luis Villagrana/nortedigital.mx